Los perros son considerados el mejor amigos del hombre, no solo por su increíble amor y compañía, sino por su lealtad y fidelidad, características que los hacen criaturas extraordinarias, merecedoras de admiración y respeto.
Integrar a un perro a la familia trae consigo un sinfín de beneficios para cada uno de los integrantes, en el caso de los niños, puede ser la oportunidad perfecta para enseñarles el principio de la responsabilidad y cuidado, esto no solo repercutirá en la formación del menor, sino que también tendrá un gran impacto en la mascota, generando fuertes vínculos de unión entre las partes; por otro lado, los adultos y adolescentes no quedan exentos de lo provechoso que es tener un compañero peludo dentro de casa, ya que en ellos también se notarán cambios, como por ejemplos, los niveles de estrés bajarán considerablemente y las risas se multiplicarán con el pasar de los días.
Establecer normas es importante desde el inicio
Para que todo este proceso de convivencia sea efectivo, es necesario establecer ciertas normas y ordenes, que mediante trucos puedan ser procesados y de fácil entendimiento para el canino, esto evitará posibles problemas de comportamiento en un futuro venidero.
Los perros son muy inteligentes, por lo que su proceso de aprendizaje puede llegar a ser muy rápido, por supuesto, dependerá de la disposición que tenga el can y de la paciencia de los dueños, lo aconsejable es comenzar el proceso de adiestramiento desde que es un cachorro, ya que en los perros adultos cuesta un poco más.
Beneficios del Entrenamiento
El entrenamiento es trascendental para la buena convivencia en el hogar, entre sus beneficios se destacan los siguientes:
- Reglas y normas de comportamiento: son necesarias para que su perro sea prudente a la hora de desenvolverse dentro y fuera del hogar, además también disminuye el nivel de estrés.
- Seguridad: Al acatar normas de conducta su integridad estará asegurada, ya que obedecerá tu llamado, e interpretará correctamente las negativas en tu voz, así que en caso de que salga corriendo hacia la calle y lo llames para detenerlo, este lo haga inmediatamente.
- Sociabilidad asegurada: Es bien sabido que los perros amaestrado suelen ser mucho más sociables, y menos agresivos, tanto con las personas como con otros animales.
Las reglas serán fundamentales para hacerles saber a los caninos cuáles son los límites que no deben traspasar, por ende, deben ser practicadas constantemente y elogiar a los pequeños por su buena captación también debe ser incluido.
Pasos para adiestrar a tu perro
- Repetición de ordenes: es necesario tomarse un tiempo para reiterar las ordenes a los cachorros, comenzar con una es esencial, e ir intercalando la práctica con caricias y juegos hará que el pequeño no se estrese ni frustre, cuando estés seguro de que reacciona a la orden, puedes continuar a la siguiente, siempre haciendo repeticiones e intercalar una con la otra, para que de este modo no se olvide de lo aprendido.
- Detalles coherentes en la enseñanza: Los perros al ser animales inteligentes, son capaces de interpretar, a través de sus sentidos, las emociones de sus dueños, por ende, al momento de establecer límites, es necesario que los mismos se respeten de manera permanente y no parcial, porque esto puede generar confusión en el animal, por ejemplo, si le enseñas a que no debe subirse a la cama, esto debe mantenerse, y no permitir que “por esta vez” se suba, porque ese preciso momento, le dará la idea equivocada al animal para interpretar tu permiso otorgado momentáneamente.
- Paciencia y tolerancia: Al ser un pequeño cachorro, hay que entender que no todas las órdenes las aprenderá de manera inmediata, por tanto debes mantener la paciencia en los momentos en los que el pequeños se aburra o simplemente no quiera continuar con las clases, trata de buscar alternativas para que pueda distraerse y que vuelva su atención nuevamente al proceso de adiestramiento.
Con amor y mucha dedicación se pueden lograr grandes resultados, llevando así la convivencia entre mascotas y dueños a un nivel superior, lleno de momentos encantadores y mágicos.