Conocer a detalle a nuestra mascota es esencial para reconocer algún cambio que amerite atención. La normalidad de las deposiciones viene dada por la calidad y cantidad del tipo de alimento que escogiste y varia por algunas enfermedades y cambios en su rutina diaria.
Normalidad
Las heces normales suelen presentar consistencia firme (parecida a la plastilina), forma cilíndrica (de tronco), carente de cuerpos extraños o parásitos y de color uniforme (marrón), con frecuencia diaria (una o más veces al día).
Para conocer la normalidad de tu mascota te recomendamos observar su comportamiento (si tarda mucho o le cuesta hacer, si hace fuera de su lugar o no hace por más que intente). Al acercarte podrás evaluar la consistencia, contenido, intensidad del olor, cantidad y color de las heces, incluso puedes tener un registro fotográfico para cuando lo lleves a su revisión veterinaria. Todo esto debe ser al momento para tener seguridad de que todo salió de tu peludo y no llegó del exterior.
Consistencia
Si a tu peludo le cuesta mucho hacer y va dejando bolitas sueltas muy duras es posible que se encuentre muy deshidratado, tenga estreñimiento o en su alimentación exista un exceso de calcio o huesos.
Revisa si las bolitas se encuentras todas unidas es posible que la deshidratación sea leve. Si la cantidad de caca es excesiva, cremosa y hace la forma de montaña probablemente ingirió algo fuera de su dieta y presente mala digestión.
La forma de diarrea (líquida) puede estar acompañada de cambio de color, gases, espuma, mucosa, terrible olor, alteración en la frecuencia de las deposiciones y cambio en el apetito de la mascota. Cualquiera de estas alteraciones son totalmente anormales y debes comunicarlo lo más rápido posible al veterinario.
Contenido
Cuerpos extraños: los más comunes son plásticos, telas, hierbas y pelo ya que sus estómagos no pueden procesar ninguno de ellos. Que salgan de su cuerpo es bueno; sin embargo, existe la posibilidad de que algún cuerpo extraño no pueda salir, generando una obstrucción o lesionando algún órgano del sistema digestivo.
Parásitos: suelen identificarse de dos formas, por medio del examen de heces que realiza el veterinario al microscopio o por observación directa de las heces frescas (suelen tener movimiento).
Blanco: Algunas mascotas con dieta BARF suelen generar heces blanquecinas sin tratarse de un motivo de alarma, si no es tu caso este tipo de deposiciones pueden deberse a gran ingesta de de huesos, infecciones bacterianas o parasitosis.
Amarillas: Un consumo excesivo de lácteos, maíz y cereales provoca deposiciones de este color. Puede indicar problemas hepáticos si está acompañada de síntomas como distención abdominal, perdida de peso, ictericia etc.
Verde: Puede deberse a la ingesta de césped (que contiene pigmentos que no pueden metabolizar), al consumo de verduras verdes en una dieta BARF, a alguna alergia/ intolerancia o a la presencia Giardias que es un parásito interno que produce heces de este color.
Negro: Para peludos con dieta BARF suele estar asociado a la ingesta de hígado, si no es el caso puede deberse a la presencia de sangre (hemorragia) a nivel del estómago o intestino delgado.
Rojo: Descarta que tu mascota haya ingerido alimentos como remolacha, papaya o algún pigmento, de no ser así mantén la calma ya que puede ser sangre, lo que indica hemorragia y debes consultar urgentemente con tu veterinario.
Conocer la normalidad de las heces de tu mascota puede ayudarte a prevenir o a reaccionar rápidamente en el momento adecuado. La frecuencia y el volumen nos dice cuan saludable y fácil de digerir es su alimento. Consulta con tu veterinario cada paso que des para que tu mascota tenga una vida feliz.